Clases de piano individuales

de duración y frecuencia a convenir, según el nivel y el objetivo deseado

Cursos especializados en técnica pianística




Mensaje a los jóvenes pianistas


Iniciarse en el universo de la música es un emprendimiento apasionante. El piano parece ser un instrumento privilegiado par ello, dado que rápidamente obtenemos algunos resultados gratificantes. Claro está, como en todo aprendizaje, la disciplina y la perseverancia son indispensables. Pero, ¿cómo conservar la motivación necesaria?

El placer que nos brinda una actividad es el mayor motor para entregarnos a ella sin medir esfuerzos. Creo que en ningún nivel artístico el tocar un instrumento puede estar totalmente desligado del placer y el juego. Perder la frescura del juego es perder el alma de la música.

Sin embargo, las exigencias cada vez mayores de rendimiento hacen difícil el conservar esta actitud lúdica. Parecería que los más altos niveles técnicos e interpretativos sólo pudiesen lograrse sacrificándola. Lamentablemente, esta actitud frente al progreso pianístico, trae como consecuencia la pérdida de la pasión por lo que se hace y el empobrecimiento artístico.

Estoy convencida de que la perfección técnico-interpretativa puede lograrse plenamente a través de una actitud de juego. Porque esto implica estar concentrado y distendido, plenamente imbuido en lo que hacemos, liberando nuestra imaginación y creatividad, enfrentando desafíos y superando limites y sintiendo el placer en el que las horas no cuentan.

Esta actitud frente al instrumento resulta en progresos permanentes y además en el disfrute del proceso. Crea también las condiciones ideales para la expresividad corporal y artística. Esta actitud se enseña y se cultiva. Forma parte de los principios que guían mi trabajo.